lunes, 19 de enero de 2009

Eumigus ayresi

El saltamontes jurásico fué lo primero que se me pasó por la cabeza cuando ví a este tosco, rechoncho, acorazado y gran saltamontes, bastante torpe, lento de movimientos y con alas atrofiadas.

Pero a pesar de ser torpe y no contar con alas, al menos útiles para volar, pues posee un par de alitas simbólicas, las especies sobreviven porque están capacitadas para ello y sobre todo, porque están perfectamente adaptadas a su medio, y si contamos que este saltamontes es habitante de arbustos y matorral espeso, hace evidente que no necesite saltar y mucho menos volar, pues la protección necesaria, se la proporciona el ramaje y la espesura de su habitat por el cual se mueve y camufla a la perfección.

1 comentario:

Nicolas Moulin - NiMou dijo...

Es feo de cojones, tiene la textura de un gecko, o sapo. Pero bueno tambien algo feillo soy jajajajaj